Son de otro planeta

Está claro que algunos políticos tienen la absoluta certeza de que la gente es tonta. De otra manera no se entienden las estupideces que nos sueltan. Aquí van dos ejemplos, uno para cada bando, para que nadie se moleste.

1) Si hace unos meses la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, para justificar la privatización del Canal de Isabel II, dijo que "así estaba dando posibilidad a los madrileños de ser propietarios de la empresa", que, subrayo, ya era pública, esta semana nos 'vende' que "su gobierno va a garantizar la asistencia sanitaria gratuita a aquellos que, por haber dejado de cotizar por agotar el cobro del paro o por haberse dado de baja en el régimen de autónomos, pierdan el derecho a dicha asistencia". Añadiendo, "la residencia en la Comunidad de Madrid será título suficiente para recibir asistencia sanitaria gratuita". Me parecería una excelente noticia si no fuera porque en España ya teníamos ese derecho desde hace mucho tiempo, no hace falta que ahora "generosamente" nos lo conceda:

Según el artículo 1 de la Ley 14/1986, de 25 de abril, Ley General de Sanidad “son titulares del derecho a la protección de la salud y a la atención sanitaria todos los españoles y extranjeros que tengan establecida su residencia en territorio nacional”. Comunidad de Madrid incluida, doña Esperanza.

2) Leire Pajín, la secretaria de Organización del PSOE, dijo hace unos días lo siguiente: "Les sugiero que estén atentos al próximo acontecimiento histórico que se producirá en nuestro planeta: la coincidencia en breve de dos liderazgos progresistas a ambos lados del Atlántico", refiriéndose a con la coincidencia de las presidencias de Barack Obama en Estados Unidos y José Luis Rodríguez Zapatero en la Unión Europea.

Y para confirmar que muchos de nuestros políticos son de otro planeta, veo que el PSOE lleva en su lista a las Elecciones Europeas ni más ni menos que a la posiblemente peor ministra de toda la democracia española, Magdalena Álvarez. Y no es que vaya de relleno en un puesto poco relevante, ¡es que va en el número 3!

Esto me lleva a hacer la siguiente reflexión: ¿no tienen los grandes partidos políticos gente más válida, más brillante, mejor preparada, para ocupar puestos de tanta responsabilidad? ¿A qué obedecen estas designaciones? ¿Deudas pendientes? ¿Favores futuros?

Luego nos extrañaremos de que este domingo la gente no vaya a votar...

En fin, pese a todo, yo os animo a que votéis el domingo. Si os pilla de paso a la que vais a tomar el aperitivo, no os cuesta nada, maj@s.