Un vestido y un amor

Hace mucho que no os pongo una cancioncita, así que vuelvo a la carga. Esta vez con el brasileño Caetano Veloso interpretando una canción del argentino Fito Páez.

A Caetano le descubrí en la película "Hable con ella" de Almodóvar, es el artista que interpreta "Currucucucú paloma" en medio de una reunión de amigos, en el porche de una casa de campo. La versión que hace -íntima y desgarradora, según el propio Almodóvar- pone los pelos de punta.

Y a Fito le escuché por primera vez hace tiempo, empujado por algunos de mis ídolos musicales -Calamaro, Ariel Rot, Sabina- que siempre que tenían ocasión hablaban maravillas de él. Pero, que queréis que os diga, a mí no me termina de convencer, su forma de cantar, para mi gusto, es demasiado chillona y estridente. Eso sí, reconozco que es capaz de hacer canciones geniales, como Mariposa Tecknicolor, Tengo una muñeca que regala besos o ésta, Un vestido y un amor, que han versionado también Ana Belén o Miguel Bosé. Yo particularmente me quedo con la versión de Caetano Veloso:

"...todo lo que diga está de más, las luces siempre encienden en el alma..."

Si en este momento estáis particularmente sensibles, no sé, por ejemplo porque acabáis de pelearos con vuestro chico/a, porque vuestro chico/a está a cientos de kilómetros de distancia o porque os habéis mudado a otra ciudad, os advierto que se os puede escapar alguna lagrimilla.

Dedicado especialmente a los que estáis en alguna de las situaciones anteriores.